domingo, 27 de diciembre de 2015

Video - Instituto de Biología Molecular y Celular de Rosario - Científicos Industria Argentina



Alejandro Vila, Dr. en Química y director del Instituto de Biología Molecular y Celular de Rosario nos cuenta que el objetivo del instituto es fomentar la ciencia de excelencia y articularla con el sector productivo y de la salud.

Sus ejes de investigación son la biología molecular de plantas, la microbiología y biología estructural

Científicos Industria Argentina


jueves, 27 de agosto de 2015

Grandes equipamientos científicos al servicio del sector productivo

Grandes equipamientos científicos al servicio del sector productivo

La Dra. Silvia Nakano Koga y el Dr. Sergio Matheos durante la apertura del workshop

La cartera de Ciencia busca fomentar la articulación entre instituciones del sistema científico nacional y empresas privadas de diferentes rubros de la industria a través de la promoción del uso de equipos de gran porte adquiridos con fondos públicos y adheridos a los Sistemas Nacionales.

La Subsecretaría de Coordinación Institucional dependiente de la Secretaría de Articulación Científico Tecnológica del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva, organizó el primer workshop “Sistemas Nacionales: articulando ciencia e industria”, orientado en esta oportunidad a la industria farmacéutica.

El objetivo de este tipo de encuentros será generar espacios de interacción entre el sector científico y el sector productivo para dar a conocer la oferta de servicios de las instituciones adheridas a los Sistemas Nacionales, relevar la demanda activa y potencial de cada sector productivo, y promover una utilización eficiente de los grandes equipamientos y bases de datos existentes en distintas instituciones de ciencia y tecnología de todo el país.

Grandes equipamientos científicos al servicio del sector productivo

El primer encuentro de “Sistemas Nacionales: articulando ciencia e industria” estuvo orientado al sector farmacéutico.

La apertura del evento estuvo a cargo del subsecretario de Coordinación Institucional, Dr. Sergio Matheos, quien realizó un balance sobre la efectivización de este primer workshop que “inaugura la puesta en marcha de una etapa de integración plena en la que la vinculación y la transferencia tecnológica van a redituar en una mayor inclusión social”.

Luego, Matheos destacó la tarea de la Subsecretaría a su cargo al señalar que “es necesario promover un uso mancomunado de equipamiento y bases de datos por parte del sector productivo para satisfacer sus demandas a partir de fomentar una directa vinculación y un trabajo de articulación con el sector científico”.

Grandes equipamientos científicos al servicio del sector productivo

El Dr. Daniel Vega disertó sobre las aplicaciones de las capacidades del Centro Atómico Constituyentes (CAC) a la industria farmacéutica.


A lo largo de la jornada de desarrollaron diversas exposiciones a cargo de renombrados científicos y representantes de instituciones sobre los equipamientos e instrumentos adheridos a los Sistemas Nacionales.

Las temáticas desarrolladas fueron: “Aplicaciones de las capacidades del Centro Atómico Constituyente (CAC) a la industria farmacéutica”, a cargo del Dr. Daniel Vega; “Aplicaciones de la Resonancia Magnética Nuclear en el análisis de productos farmacéuticos”, desarrollada por el Dr. Gerardo Burton; y “Combinación de criofractura con microscopía electrónica como método para caracterizar nanoestructuras utilizadas como vehículos de fármacos” por el Dr. Luis S. Mayorga.

Grandes equipamientos científicos al servicio del sector productivo

El Dr. Gerardo Burton desarrolló las aplicaciones de la Resonancia Magnética Nuclear en el análisis de productos farmacéuticos.. 

Asimismo, se desarrolló una mesa redonda en la que diversos empresarios del sector disertaron sobre los ensayos analíticos de alta complejidad en la industria farmacéutica, con foco en la articulación de la demanda del sector privado con la oferta de Sistemas Nacionales.

El cierre de la jornada estuvo a cargo del secretario de Articulación Científico Tecnológica, Dr. Alejandro Ceccatto, quien destacó la conformación de ámbitos de encuentro y articulación entre sectores como “el resultado de un proceso complejo que promueve el trabajo de manera colaborativa, poniendo a disposición el equipamiento para el uso de toda la comunidad científica y del sector productivo”.

 Grandes equipamientos científicos al servicio del sector productivo

(de izq. a der.) La Dra. Vitali, el Dr. Montes de Oca, el Dr. Seigelchifer y el coordinador de la mesa redonda, Dr. Wunderlin.

Luego, señaló que estos encuentros “suponen un punto de partida para que distintos sectores productivos industriales, cámaras y asociaciones empresarias puedan tener exposición a este tipo de información logrando que el trabajo realizado durante todo este tiempo resulte útil más allá de las fronteras del sistema científico tecnológico”.

Grandes equipamientos científicos al servicio del sector productivo

El Dr. Luis S. Mayorga durante su disertación en el primer encuentro de “Sistemas Nacionales: articulando ciencia e industria”

Participaron del encuentro más de 50 representantes de la industria farmacéutica, referentes de instituciones adheridas a los Sistemas Nacionales, e investigadores vinculados al sector.

Acerca de Sistemas Nacionales

El propósito de los Sistemas Nacionales es alcanzar una utilización eficiente de los grandes equipamientos y una mejor organización y acceso a las bases de datos científicos existentes en las distintas instituciones de ciencia y tecnología de todo el país.

Grandes equipamientos científicos al servicio del sector productivo

El Dr. Ceccatto durante su disertación al cierre del evento.

Los Sistemas actúan en forma coordinada en diversas áreas de interés para la comunidad científica, con el fin de poner a disposición de los investigadores tanto las bases de datos como los equipos registrados en el patrimonio de un organismo público.

Asimismo, brindan apoyo económico a las instituciones adheridas para garantizar su actualización constante.

Más información: www.sistemasnacionales.mincyt.gob.ar

Mincyt



domingo, 25 de enero de 2015

Descifran el mecanismo molecular que usa la célula para obtener energía

Espectroscopía Raman

Espectroscopía Raman. Damián Álvarez-Paggi y Daniel Múrgida, del INQUIMAE. 
Foto: CONICET Fotografía.

La clave reside en la transferencia de electrones, partículas con carga negativa.

Conocer este proceso permitiría optimizar, por ejemplo, dispositivos usados para generar energía solar o fabricar biocombustibles

Durante años diferentes grupos de investigación del mundo debatieron – muchas veces encarnizadamente – sobre la naturaleza de la transferencia de electrones en la respiración celular, un proceso que transforma los alimentos que se ingieren en la fuente de energía que utilizan las células.

En las células de plantas y animales, esta reacción ocurre en un conjunto de pequeñas organelas de la célula, llamadas mitocondrias.

En una investigación reciente, publicada en el prestigioso Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS), los investigadores zanjaron la discusión histórica al revelar la naturaleza de este mecanismo.

“Durante la respiración celular fluyen electrones a través de proteínas en la membrana de la mitocondria, y esto genera el potencial para fabricar las moléculas que utiliza la célula como fuente de energía”, explica Damián Álvarez-Paggi, becario doctoral del CONICET en el Instituto de Química Física de los Materiales, Medio Ambiente y Energía (INQUIMAE, UBA-CONICET) y uno de los autores.

A partir del estudio de una proteína de la membrana de la cadena respiratoria de la bacteria Thermus thermophilus, el equipo descubrió que existen dos circuitos – no uno solo, como se suponía hasta ahora – que regulan el mecanismo de transferencia de electrones.

Alejandro Vila, investigador principal y director del Instituto de Biología Molecular y Celular de Rosario (IBR) lo compara con una puerta que se puede abrir en dos sentidos.

“La clave reside en unos átomos de cobre alojados dentro de la proteína y que actúan como conductores de los electrones”, explica.

Estas partículas deben entrar y salir, y esto ocurre a través de dos caminos diferentes: hasta ahora se veía que el transporte ocurría por una única vía, como una puerta que se abre en un sentido. “Se creía que por un mismo camino entraba o salía”, grafica.


Alejandro Vila y Luciano Abriata, del IBR. Equipo de Resonancia Magnética Nuclear. 
Foto: Gentileza investigadores.

Sin embargo, cuando modificaron ligeramente la estructura de la proteína descubrieron que la puerta se podía ‘abrir’ hacia ambos lados.

“El sitio de cobre tiene dos estados: uno que le permite tomar electrones y otro que le permite enviarlos hacia otra parte”, asegura Vila.

Ese segundo estado se conoce como invisible u oculto, y está latente hasta que pequeñas perturbaciones en la estructura de la proteína hacen que se active en un determinado momento.

Para estudiarlo, el equipo del IBR introdujo pequeñas mutaciones en la estructura de la proteína, que no afectaban los átomos de cobre pero sí el entorno que lo rodeaba.

El equipo del INQUIMAE demostró experimental y teóricamente que estas variaciones permitían transportar los electrones a grandes distancias – en términos celulares: alrededor de 20 Angstrom, una diez mil millonésima parte del metro.

“Como cada camino está optimizado para un proceso distinto, esto permite que el flujo de electrones ocurra a altas velocidades, compatibles con la vida, pero al mismo tiempo de manera eficiente, lo cual permite optimizar la producción de energía” comenta Álvarez-Paggi.

Ciencia básica: el pilar de los desarrollos

Daniel Murgida, investigador independiente del CONICET en el INQUIMAE y coordinador del estudio junto con Vila, comenta que la transferencia de carga es un mecanismo que está presente en diferentes sistemas que van desde la fotosíntesis vegetal, con impacto en biocombustibles, hasta las celdas solares, de las que constituye el principio básico de funcionamiento.

“En todos ocurren reacciones de transferencia de electrones”, dice Murgida, “y si uno comprende como funciona la teoría puede eventualmente aprender a imitar, regular y mejorar el funcionamiento de enzimas para su uso, como ladrillos en la construcción de dispositivos tecnológicos”.

Además, a largo plazo, este tipo de hallazgos podrían contribuir a entender y buscar tratamientos para enfermedades mitocondriales como el síndrome de Kearns-Sayre, caracterizado por debilidad en los músculos oculares, pérdida de la visión, problemas cardíacos y de equilibrio. Se estima que las enfermedades mitocondriales afecta a uno de 4 mil niños.


Trabajo conjunto

Los equipos de trabajo el IBR y el INQUIMAE colaboraron codo a codo en este proyecto.

Los investigadores de Rosario se centraron en la generación de las mutaciones de la proteína y la espectroscopía electrónica y de resonancia magnética nuclear, mientras que el grupo del INQUIMAE realizó experimentos electroquímicos, de espectroscopía Raman y cálculos cuánticos de alto nivel.

“Entre Buenos Aires y Rosario hicimos una labor complementaria para resolver un problema.

Es una de las colaboraciones más satisfactorias que he tenido como investigador”, asegura Vila.

“Entre los grupos del IBR y del INQUIMAE conformamos un equipo de trabajo horizontal con capacidades complementarias, pero con intereses y objetivos comunes.

El efecto sinérgico de la colaboración nos permitió alcanzar resultados que van mucho más allá de la suma de nuestras capacidades individuales”, señala Murgida.

CONICET/DICYT
dicyt.com